Explorando características, ventajas e inconvenientes de los diferentes tipos de cerramientos
La elección de un cerramiento es tan importante para el diseño de tu propiedad como para tu seguridad. Pero, al elegir entre tantas opciones suele ser complicado, ya que hay muchos tipos de cerramientos diferentes. Cerramientos metálicos, mallas rígidas, vallas peatonales, etc. Hay muchas opciones, cada una con sus propias ventajas e inconvenientes.
¿Cómo elegir la valla adecuada?
Cuando obtengas un presupuesto de vallas, asegúrate de comparar las diferentes ofertas y tipos de vallas disponibles en el mercado. Hay una serie de características diferentes que determinarán el tipo de cerramiento que elijas:
- El precio
- El aspecto
- La residencia
- La facilidad de instalación, etc.
A continuación, ofrecemos una lista no exhaustiva de los principales tipos de cerramientos:
Cerramiento de alambre
El cerramiento de alambre sigue siendo el tipo de valla más común, es sencillo de instalar y relativamente sólido, es el más utilizado para delimitar una parcela con un coste menor.
La mayor desventaja es que la valla no resiste los golpes (no es muy eficaz para mantener a los animales en su terreno). También es poco atractivo y deja la vista libre. Por lo tanto, no es la mejor solución posible para ocultar a un vecino.
Todavía existe la posibilidad de colocar un panel o una pantalla de privacidad delante de su valla, por muy poco atractivo que sea.
Cerramiento de hormigón
La valla de hormigón es una valla de alta gama, muy sólida y estética. La mayor ventaja del hormigón es que se puede fabricar en muchas formas y colores diferentes. Si la instala un profesional, la valla de hormigón será duradera, fuerte y estética.
La desventaja de las vallas de hormigón es su precio, que no es muy competitivo, y su instalación, es complicada. Es mejor llamar a un profesional y pedir diferentes presupuestos de vallas de hormigón para beneficiarse de una valla de excelente calidad.
Cerramientos metálicos
Un cerramiento metálico es una excelente opción cuando se quiere combinar la solidez de una valla de diseño. Los cerramientos metálicos, que a menudo se venden en paneles, ofrecen un aspecto sólido mucho más agradable a la vista que las vallas de alambre.
Otra ventaja es que existe un número infinito de mallas metálicas, que se pueden fabricar con cualquier forma y en colores.
Una de las desventajas de las mallas metálicas es su precio. Aunque la instalación de este tipo de vallas suele ser menos costosa que la de las vallas de hormigón, algunos modelos de vallas metálicas pueden ser más caros.
Vallas de madera
Más tradicionales, las vallas de madera tienen la ventaja de ofrecer un aspecto muy natural, al tiempo que garantizan una cierta facilidad de instalación. La madera tiene la ventaja de ser un material duradero, ecológico y resistente, y sin duda ofrecerá un diseño agradable y una gran solidez.
Entre las desventajas de una valla de madera se encuentra el mantenimiento, que debe realizarse regularmente para aumentar la longevidad de tu valla.
El precio también puede ser un problema, ya que varía mucho según el tipo de madera elegido. Además, algunos tipos de madera son de mala calidad y pueden deteriorarse. Por lo tanto, es mejor optar por una valla de madera tratada, capaz de soportar los elementos.
Vallas de PVC
Las vallas de PVC son una solución eficaz de gama media que tiene un aspecto relativamente bueno, al menos durante los primeros años.
La principal ventaja de las vallas de PVC es su bajo coste (una valla de PVC es más cara que una de alambre, pero también es mucho más duradera) y su elegante diseño, aunque es raro encontrar un color distinto al blanco.
Una valla de PVC tampoco necesita mantenimiento, lo que constituye otra agradable ventaja.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que una valla de PVC no envejece. El PVC es un material que se desgasta con bastante rapidez cuando está expuesto a la intemperie y tiende a cambiar de color (amarillear). Por supuesto, tu valla de PVC estará bien durante unos años, pero tendrás que sustituirla mucho más rápidamente que una valla de hormigón, que tiene una esperanza de vida casi ilimitada.
